Ayúdanos a que las personas con TEA del Centro RAMIB tengan una vida activa.
Gracias al proyecto “Ejerci-TEA”, conseguiremos que las personas con TEA del Centro RAMIB se beneficien de un gimnasio para realizar programas de actividad física adaptados para adultos con autismo, generando grandes beneficios en muchas áreas importantes de su vida.
Una campaña a favor de
5
Beneficiarios directos
Aquellas personas que de forma natural han sido beneficiadas por las acciones desarrolladas en la campaña.
20
Beneficiarios indirectos
Aquellas personas identificables que reciben un efecto potencial de las acciones desarrolladas en la campaña.
Probablemente haya visto los titulares: los estudios dicen que los niños y adultos con autismo corren el riesgo de tener un estilo de vida inactivo y obesidad. Si bien las razones están sujetas a debate, está claro que las personas con TEA a menudo enfrentan desafíos únicos en cuanto a la aptitud física.
Las características centrales del autismo (dificultades de procesamiento sensorial, problemas sociales, de comunicación y de comportamiento) pueden hacer que unirse a un juego de futbol en el recreo o jugar al juego del pañuelo con los vecinos sea una lucha. Sin embargo, lo que puede ser menos conocido es que muchas personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) también enfrentan problemas con las habilidades motoras (músculos), incluidos el equilibrio y la coordinación, ya que, dentro de las dificultades de procesamiento sensorial, están las del procesamiento de su propio cuerpo (habilidades propioceptivas)
Los niños y niñas a menudo aprenden habilidades sociales al observar los movimientos de otras personas, como los gestos. Pero las personas que ponen menos énfasis en lo que ven debido en gran parte a dificultades de procesamiento sensorial y de su entorno, pueden tener dificultades para aprender gestos e interpretar las acciones de los demás. Las habilidades motoras también implican la planificación: saber lo que quiere que haga su cuerpo y coordinar sus movimientos para hacerlo. Esto puede ayudar a regular y mejorar su estado emocional, sus habilidades sociales y de comunicación
Además de habilidades motoras por debajo del promedio, muchas personas con autismo pueden tener otros problemas que les impiden hacer suficiente ejercicio, unirse a una liga de fútbol o jugar baloncesto en el vecindario. La seguridad puede ser una de esas barreras.
No obstante, la seguridad no es la única barrera para los deportes y la recreación; a veces, comprender las reglas y las convenciones sociales de los juegos puede impedir que una persona con TEA participe. Hay numerosos casos en los que un entorno complejo con muchas reglas difíciles de entender, y a veces incongruentes, puede producir rechazo en una persona con TEA, motivando la no participación o la evasión
Por otro lado, están las dificultades de procesamiento sensorial de una persona con TEA. "Si el único problema que tuviéramos fueran las habilidades motoras, estaríamos bien. Tiene problemas sensoriales que a veces le impiden usar sus habilidades motoras porque es demasiado fuerte o brillante. Si está parado allí con las manos sobre los oídos, ¿Cómo va a funcionar en un juego? También tenemos desafíos sociales y emocionales que otras personas no entienden".
Mediante la construcción de un gimnasio donde trabajar sus habilidades motoras y propioceptivas podemos controlar todos estos aspectos mencionados anteriormente y ofrecer una gran mejora en la calidad de vida de las personas a las que apoyamos.
APNA (web)
Brindar herramientas que permitan un mejor abordaje de las siguientes situaciones:
La investigación sostiene que las personas que participaron en programas de actividad física diseñados para personas con TEA mostraron avances significativos en sus habilidades sociales y de comunicación. Las actividades incluyeron paseos a caballo, varios tipos de juegos grupales, programas para correr/trotar y exergaming (por ejemplo, Nintendo Wii y otros juegos electrónicos que involucran actividad física).
Los investigadores han considerado por qué la actividad física mejora las habilidades sociales. Cuando se diseñan apropiadamente, los programas de actividad física pueden brindar un entorno divertido y seguro para interactuar con otras personas. En otras palabras, pueden ofrecer excelentes oportunidades para practicar habilidades sociales.
Es muy alentador que los distintos análisis confirmasen que las personas en el espectro mejoraron significativamente su fuerza y resistencia muscular al participar en programas como exergaming, ejercicio físico y juegos grupales, como botcha o petanca. Esto es particularmente importante ya que sabíamos por estudios previos que las personas con autismo tienden a tener una fuerza y resistencia muscular más pobres de lo que es típico para su edad. La fuerza y la resistencia son importantes no solo para la salud física, sino también para aprovechar las oportunidades sociales que implican actividad física, incluidos los deportes recreativos y los juegos no estructurados.
Muchas personas con TEA tienen habilidades físicas más bajas en comparación con otras personas. Estas habilidades incluyen el equilibrio, la coordinación corporal, el control visomotor y otras habilidades de movilidad. Muchos tipos de actividades físicas mejoran el estado físico relacionado con las habilidades de las personas con autismo. Estas actividades incluían juegos de ejercicios basados en computadora, saltar en un trampolín (con supervisión y barreras de seguridad), entrenamiento de habilidades motoras (por ejemplo, tenis de mesa)
Muchos tipos de actividades físicas, y las oportunidades sociales que brindan, requieren lo que llamamos "habilidades motoras fundamentales". Estas habilidades básicas incluyen correr, lanzar, atrapar, etc. La investigación demuestra que los programas de ejercicio mejoran significativamente estas habilidades entre las personas con autismo, mejorando su calidad de vida
Desde una perspectiva educativa y de habilidades para la vida, nuestro trabajo como profesionales es identificar regularmente las áreas de necesidad de un individuo y abordarlas de la manera más adaptable posible. Hay una razón por la que tantas personas tienen dificultades en un salón de clases estándar. El enfoque en tomar exámenes en lugar de “aprender a aprender” conduce a habilidades que no son necesariamente aplicables a necesidades y objetivos futuros. Para la programación de fitness, la jerarquía tiende a parecerse a esto (en orden de importancia):
Desarrollar, mantener y mejorar las habilidades de movimiento.
Para las personas con TEA que a menudo tienen dificultades para prestar atención a una tarea de duración superior a 10 o 20 segundos, las conductas de creatividad y socialización no son un objetivo inmediato. Es mucho más.
Este proyecto ayuda, además a las personas con TEA a las que apoyamos, a más de 100 personas entre profesionales y familiares, que ven como su calidad de vida va mejorando día a día.